Hay lámparas colgantes que llaman la atención a la primera vista. Es el caso de todas las lámparas Nelson Bubble de Herman Miller, hechas en piel translúcida – un material que las convierte en piezas elegantes, atemporales y funcionales. Todas las lámparas de techo de esta colección han sido desarrolladas por el diseñador George Nelson, que se enamoró de las antiguas lámparas suecas y se inspiró en estas para desarrollar aquella que es, probablemente, una de las colecciones estrella de Herman Miller.
Bien al estilo de la marca estadunidense, las Nelson Bubble Pendant priman por su estética atemporal y calidad en los acabados. Están hechas en piel translucida y eso lo dice todo. Este es un material que permite una difusión tenue y constante de la luz, por lo que estas piezas son perfectas para tener en ambientes de trabajo o en el hogar.
La piel translucida es requintada y resistente, así que tener una pieza hecha con este material es siempre un acierto. Pensadas para pasar de generación en generación, las Bubble de Herman Miller son de esas lámparas versátiles y reconocibles internacionalmente, por sus líneas icónicas. No pasan de moda y tampoco se estropean fácilmente, debido a su alta resistencia y durabilidad.
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